El jazz es un género musical que nació a finales del siglo XIX en Estados Unidos y que ha tenido una gran influencia en la música de todo el mundo. Sin embargo, no es un género exclusivo de este país, ya que muchos otros lugares han desarrollado una próspera escena de jazz, como es el caso de Bélgica.
La escena de jazz en Bélgica
Bélgica cuenta con una rica y variada escena de jazz, con festivales y músicos de renombre que han dejado su huella en la historia de este género musical. Uno de los festivales más importantes es el Jazz Middelheim, que se celebra cada año en la ciudad de Amberes y que ha contado con la presencia de grandes artistas internacionales como Miles Davis o Herbie Hancock.
Además, en Bélgica han surgido músicos destacados que han llevado su música a diferentes partes del mundo. Uno de ellos es Toots Thielemans, considerado uno de los mejores armonicistas de jazz de todos los tiempos. Nacido en Bruselas en 1922, Thielemans comenzó su carrera musical en su país natal, pero pronto se trasladó a Estados Unidos, donde colaboró con grandes artistas como Ella Fitzgerald o Quincy Jones.
Discografía de Toots Thielemans
A lo largo de su carrera, Toots Thielemans grabó más de 100 discos como solista y colaboró en más de 1.000 grabaciones de otros artistas. Entre sus álbumes más destacados se encuentran The Whistler and His Guitar (1954), Man Bites Harmonica! (1957) y Only Trust Your Heart (1988).
Pero sin duda, uno de sus mayores éxitos fue la canción Bluesette, compuesta por él mismo en 1962 y que se convirtió en un clásico del jazz. Esta canción ha sido versionada por numerosos artistas, incluyendo a Frank Sinatra y Stevie Wonder.
Anécdotas y curiosidades
Además de su talento musical, Toots Thielemans era conocido por su gran sentido del humor y sus divertidas anécdotas. Una de ellas es que, a pesar de ser un virtuoso de la armónica, en realidad él quería ser guitarrista. Sin embargo, cuando era joven, su padre le dijo que no podía permitirse comprarle una guitarra, así que optó por la armónica, un instrumento más económico.
Otra curiosidad sobre Thielemans es que, a pesar de haber vivido y trabajado en Estados Unidos durante muchos años, nunca aprendió inglés. Aunque esto no le impidió colaborar con grandes artistas y hacerse un nombre en la escena musical internacional.
Relación con Holanda
Bélgica y Holanda comparten una larga historia y muchas similitudes culturales, por lo que no es de extrañar que también compartan una conexión en el mundo del jazz. De hecho, Toots Thielemans tuvo una estrecha relación con el saxofonista holandés Piet Noordijk, con quien colaboró en numerosas ocasiones.
Además, muchos músicos belgas y holandeses han trabajado juntos y han participado en festivales y proyectos musicales en ambos países. Esta colaboración ha permitido que el jazz siga prosperando en la región y que artistas de ambos países sean reconocidos en todo el mundo.
Conclusión
En resumen, Bélgica es un país con una sólida escena de jazz, que ha dado grandes músicos y ha acogido importantes festivales de este género. Entre ellos, destaca Toots Thielemans, cuyo legado musical sigue vivo y continúa inspirando a artistas de todo el mundo. Y su relación con Holanda demuestra que la música no tiene fronteras y que puede unir a diferentes países y culturas.
